EL VIAJE A CHUCHELANDIA
ESCRITO POR LARA ROMERO
Érase una
vez una niña llamada Andrea. Ella tenía el pelo castaño, la nariz pequeña y los
ojos azules.
Le gustaba
mucho llevar vestidos y lo que más le gustaban eran… ¡LAS CHUCHES!
Un día
cuando era de noche, Andrea fue al baño porque no podía dormir. Al no haber luz
se dio un golpe contra el lavabo y se cayó al suelo.
De repente
allí apareció una persona muy extraña. Tenía la cara banca y rosa. Su cuerpo
estaba formado por un solo palo ¡PARECÍA UNA PIRULETA! Aquella persona le dijo:
-¡¡¡¡Hola!!!! Soy dulcinea. Quería preguntarte si quieres
vivir una aventura conmigo el Chuchelandia. ¡POR FIN! El sueño de Andrea se
había cumplido, viajar a Chuchelandia.
Ella muy emocionada, asintió con la cabeza.
Entonces
Dulceia y Andrea viajaron a Chuchelandia en un escoba muy peculiar que tenía
forma de chupa chus.
Cuando
llegaron, todos los habitantes fueron a saludar a Andrea.
Andrea vio
que todo era maravilloso porque las cosas eran de chocolate, los árboles de
piruleta, el suelo de regaliz, el sol de caramelo y las nubes de algodón de
azúcar.
Los
habitantes de Chuchelandia le explicaron que tenían un grave problema. Al hacer
tanto calor la reina helado se estaba derritiendo y no podían hacer nada. Y se
preguntaban si Andrea podría ayudarlos. Andrea les dijo que sí que les podía
ayudar porque al hacer la maleta se trajo mucho hielo por si bebían alguna bebida.
Su pan era hacer un palacio de hielo recubierto de piedras de caramelo por la
parte de fuera.
Entonces
todos los habitantes junto a Andrea comenzaron a construir el castillo.
Tardaron en construirlo tres horas.
Cuando
terminaron la reina le dio las gracias a Andrea por haberse esforzado tanto y
de recompensa, le dio 80 bolsas de tabletas de chocolate, 90 caramelos y
piruletas, 50 algodones de azúcar y 1000 regalices. Andrea les dio las gracias
y muy feliz se quedó hablando con Dulceina, cuando de repente… se despertó
sobresaltada. Se encontraba en el baño con un moratón en la frente. ¡TODO HABÍA
SIDO UN SUEÑO!
Corriendo
fue a contárselo a sus padres y a curarse la herida.
¡FIN!
LUGARES CON ENCANTO
ESCRITO POR MIREYA TEMIÑO
Uno de los lugares con encanto que a mí me gusta mucho es la
zona que hay cerca de Santo Domingo de Silos y Covarrubias.
A pocos kilómetros de Santo Domingo de Silos encontramos La
Yecla. Es un profundo desfiladero hecho a lo largo de miles de años por la
acción de las aguas del arroyo El Cauce. Tiene zonas con una anchura que apenas
llega a dos metros. A través de unas pasarelas se puede cruzar por encima del
arroyo todo el desfiladero que mide unos 600 metros. Además, en lo alto de la
montaña hay muchos nidos de buitres. Es precioso.
También cerca de Covarrubias hay otro lugar que me encanta y
es el monasterio de San Pedro de Arlanza. Este monasterio fue fundado en el año
912 y fue el más importante de Castilla. Ahora solo queda en ruinas pero se
pueden ver restos de claustro menor, el claustro mayor y los lugares donde vivían los monjes.
Es curioso un enorme árbol que hay en el mismo claustro. Es
un Pinopo, un ejemplar único en la provincia, pues se cree que lo trajeron
desde Cádiz para el monasterio.
Está rodeado de naturaleza junto al río Arlanza y es un lugar
precioso para dar un paseo porque cerca hay sitios muy bonitos.
Por un sendero se puede ir a las ruinas de la Ermita de San
Pelayo y desde su altura hay unas vistas increíbles del monasterio. También,
por otro camino cercano se puede llegar a un sito llamado Fuente Azul, donde
hay una cueva de agua muy profunda. Es un lugar con mucho encanto.